Microsoft evita el pago de 4.500 millones de dólares en impuestos en EE UU.
El sistema fiscal estadounidense es un coladero. Y eso permitió a Microsoft evitar entre 2009 y 2011 el pago de 4.500 millones de dólares (unos 3.400 millones de euros) en impuestos. Lo consiguió expatriando el equivalente a 21.000 millones (16.200 millones de euros) en ventas, de acuerdo con informe elaborado por el subcomité de investigaciones del Senado de EE UU, que está siendo discutido a puerta cerrada en Washington.
El caso de la firma tecnológica de Redmond no es único, como señalan los relatores del informe, que también citan las maniobras fiscales hechas por Hewlett-Packard con el mismo propósito. La investigación examina como las grandes multinacionales transfieren las ganancias de sus operaciones hacia países donde la imposición es más favorable. Lo hacen de forma lícita.
Es un asunto recurrente en el Capitolio, por su carga política y por la urgencia que tiene EE UU para dar con fuentes de ingresos que le permitan reducir el déficit público. En el caso de estas firmas tecnológicas, como también hacen Google, Apple o Cisco Systems, utilizan los derechos de propiedad intelectual, royalties y licencias como canal para no rendir cuentas al Tío Sam.Microsoft saltó al paso de la revelación diciendo que no hace nada irregular y pone de relevancia la compleja estructura del actual sistema fiscal en EE UU
Microsoft saltó al paso de la revelación diciendo que no hace nada irregular y pone de relevancia la compleja estructura del actual sistema fiscal en EE UU. También señala que cooperó en todo momento con la investigación. El senador Carl Levin, el mismo que atacó a Goldman Sachs por el empaquetado de hipotecas basura, considera sin embargo que estás prácticas son “dudosas”.
La cantidad que se baraja en el caso de Microsoft equivale a la mitad de las ventas que tiene en EE UU. Ese dinero se suele enviar hacia países como Irlanda. Por el panel que preside Levin estaba previsto que pasaran para prestar testimonio ejecutivos de Microsoft y de HP, así como de la consultora Ernst & Young y funcionarios de la agencia que recauda impuestos en EEUU. La manera en la que las empresas, especialmente las del sector tecnológico, usan sus filiales en el extranjero para beneficiarse fiscalmente es un problema que demócratas y republicanos están de acuerdo en que hay que corregir cuanto antes. El problema está en la manera de ponerse de acuerdo en Washington para tapar esos agujeros, ante el lobby que ejercen estas compañías. En un momento en el que se deben adoptar difíciles decisiones presupuestarias, en el que las familias se enfrentan a incrementos de impuestos y recortes de gastos en programas públicos críticos en el ámbito de la educación y la salud, estas estructuras son inaceptables”, remachó Levin. Abuso en el que, según el senador, participan abogados, auditores y asesores fiscales.
COMENTARIO:
El caso de la firma tecnológica de Redmond no es único, como señalan los relatores del informe, que también citan las maniobras fiscales hechas por Hewlett-Packard con el mismo propósito. La investigación examina como las grandes multinacionales transfieren las ganancias de sus operaciones hacia países donde la imposición es más favorable. Lo hacen de forma lícita.
Es un asunto recurrente en el Capitolio, por su carga política y por la urgencia que tiene EE UU para dar con fuentes de ingresos que le permitan reducir el déficit público. En el caso de estas firmas tecnológicas, como también hacen Google, Apple o Cisco Systems, utilizan los derechos de propiedad intelectual, royalties y licencias como canal para no rendir cuentas al Tío Sam.Microsoft saltó al paso de la revelación diciendo que no hace nada irregular y pone de relevancia la compleja estructura del actual sistema fiscal en EE UU
Microsoft saltó al paso de la revelación diciendo que no hace nada irregular y pone de relevancia la compleja estructura del actual sistema fiscal en EE UU. También señala que cooperó en todo momento con la investigación. El senador Carl Levin, el mismo que atacó a Goldman Sachs por el empaquetado de hipotecas basura, considera sin embargo que estás prácticas son “dudosas”.
La cantidad que se baraja en el caso de Microsoft equivale a la mitad de las ventas que tiene en EE UU. Ese dinero se suele enviar hacia países como Irlanda. Por el panel que preside Levin estaba previsto que pasaran para prestar testimonio ejecutivos de Microsoft y de HP, así como de la consultora Ernst & Young y funcionarios de la agencia que recauda impuestos en EEUU. La manera en la que las empresas, especialmente las del sector tecnológico, usan sus filiales en el extranjero para beneficiarse fiscalmente es un problema que demócratas y republicanos están de acuerdo en que hay que corregir cuanto antes. El problema está en la manera de ponerse de acuerdo en Washington para tapar esos agujeros, ante el lobby que ejercen estas compañías. En un momento en el que se deben adoptar difíciles decisiones presupuestarias, en el que las familias se enfrentan a incrementos de impuestos y recortes de gastos en programas públicos críticos en el ámbito de la educación y la salud, estas estructuras son inaceptables”, remachó Levin. Abuso en el que, según el senador, participan abogados, auditores y asesores fiscales.
COMENTARIO:
- En este artículo de prensa nos encontramos, una
noticia que ya no parece sorprendente, la evasión de impuestos, los paraísos
fiscales y demás medios creados y utilizados por los ricos para acumular y
proteger su dinero o el de los demás y no dar cuenta a ninguna institución para
no pagar impuestos; un dinero que necesita la sociedad para funcionar tal y
como está diseñada.
En este caso se descubre
cómo han ido apareciendo unas espacios denominados “OFF-SHORE”, países que
poseen unos impuestos bastante más bajos que los vigentes en los territorios
donde las empresas desarrollan su ejercicio económico y obtienen por ello importantes
beneficios: un ejemplo de este espacio fiscal es Irlanda.
Dada esta situación
favorable las empresas se aprovechan y declaran sus ventas y ganancias en ese
país dejando huérfano de recaudación al país donde se ha producido esa
actividad comercial, que supone una fuente de ingresos necesaria para acabar
con el déficit público y aumentar las ayudas y servicios sociales. En este caso
la gigante empresa Microsoft, transfirió sus ganancias a otros países donde la
imposición es más favorable evitándose el pago de 4.500 millones de dólares en
impuestos en Estados Unidos.
Esta situación que estamos viviendo
es completamente inmoral, no solo por la avaricia inacabable de las
multinacionales por tener más beneficios sino porque esta situación de evasión
de impuestos es semilegal pero por supuesto a estos gigantes no se les puede
parar y los lobbies que generan son tan poderosos que esta situación parece que
solo está empezando. La otra cara es la inmoralidad que muestra Irlanda al
facilitar la entrada masiva de capitales, pero claro: ¿quién se negaría a que
le pagasen millones y millones directos para llenar las arcas públicas y los
bolsillos de sus políticos y empresarios?, esta situación hace mucho daño a los
países a los que se defrauda y más aún en ésta época de crisis en la que
cualquier recaudación es agua de Mayo, pero por supuesto los políticos
prefieren recortar nuestros derechos básicos: la sanidad, educación, la
justicia… que crear una regulación fiscal férrea conduciéndonos a un futuro que
parece estar más en la economía y en el capital que en las personas.
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